Lo ocurrido en último domingo en la tienda Tai Loy, con sede en Barranco, contra Anaí Medrano Bustamante, es discriminación racial debido a que se le acusó, falsamente, de robo por su condición de mujer afroperuana.
Personal de seguridad y trabajadores de la mencionada tienda, como si fuera una delincuente, no les bastó maltratarla delante de su menor hijo de ocho años y clientes que se encontraban en ese momento. También la maltrataron al seguirla hasta su domicilio y exponerla, negativamente, ante sus familiares y vecinos.